martes, 17 de noviembre de 2009

¿Tiene esperanza la CNDH con Plascencia?


Parece que Raúl Plascencia Villanueva, nuevo titular de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos mexicana (CNDH), que se había desempeñado como primer visitador de esa institución en la era de José Luis Soberanes, desea marcar su distancia y arrancarse el cordón umbilical que, nefastamente, lo une a este último.
Uno de los principales señalamientos que hace la sociedad civil al relevo de Soberanes es la demasiada cercanía o dependencia que Plascencia tiene (o tenía) del primero. Lo nocivo de esa cercanía -han afirmado analistas y organizaciones no gubernamentales- es que continuará colocando a la CNDH al servicio de los grupos políticos que medran al amparo del Estado, tal y como lo hizo el lamentablemente célebre Soberanes.
Sin embargo yo no me atrevería a afirmar de modo tan contudente la anterior hipótesis. Soy partidario de darle el beneficio de la duda al nuevo funcionario, sobre todo cuando en la política mexicana tenemos rompimientos tan abruptos de supuestos "delfines" con sus tutores. Allí están los casos emblemáticos entre Álvaro Obregón y Plutarco Elías Calles o Carlos Salinas y Ernesto Zedillo, sólo por mencionar los más conocidos, pero la lista es larga entre gobernadores y líderes sindicales (Carlos Jonguitud y Elba Esther Gordillo).
La expectativa que me genera Plascencia se basa en dos hechos recientes. La empresa especializada en encuestas, denominada Opina, una de las tres más importantes que trabajan en México, invitó en la semana que va del lunes 9 al viernes 13 de este mes a diferentes sectores de la sociedad civil a externar sus opiniones sobre el lugar que ocupa la CNDH en estos momentos en la realidad nacional.
Tanto organizaciones no gubernamentales (ONG) como periodistas ocupados en temas de los derechos humanos participamos en esa encuesta, que según todos los indicios, sospecho fue encargada por el propio Plascencia o algún colaborador cercano a él.
Posteriormente, el lunes 16, en el popular programa de radio Y usted qué opina, que conduce Nino Canún en la 69 de AM, éste convocó a los especialistas y ex aspirantes al cargo, José Antonio Vital Galicia, Luis Eduardo Zavala, Jorge Eduardo Pascual, Carmen Teresa Silva Fajardo, Patricia Olamendi y al general José Francisco Gallardo, quienes también consideraron que el desempeño de la CNDH bajo la conducción de Soberanes dejó mucho qué desear y que el nombramiento de Plascencia no ofrece expectativas de mejoramiento. En esta mesa cabe señalar que sólo Olamedi se mostró optimista y se negó a generalizar.
Por esta preocupación de tomarle el pulso a la sociedad, abrigo la esperanza de que el nuevo presidente de la CNDH quiera empezar a marcar su distancia de Soberanes, que al parecer recibirá el pago por sus servicios al poder con un nombramiento de magistrado en la Suprema Corte de Justicia.
Por el bien de todos, ojalá Plascencia nos regale una buena sorpresa y elimine lo podrido en la institución que hoy preside. En fin, la esperanza es el capital de los desposeídos.

1 comentario:

  1. Veo que eres un incansable de tu trabajo, me gusto el artículo que escribiste en el blog, yo también espero que las cosas cambien para bien muy pronto. Te agradezco que me hagas partícipe de tus conclusiones y ojala este país vea mejores tiempos.Y que sus opiniones den buenos frutos.

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